"Descartes nos habla de la duda metódica en el Discurso del método y en la Primera meditación de Meditaciones metafísicas. Descartes va a partir de la duda universal para buscar una primera verdad incuestionable en la que fundamentar todo su sistema. En general, en Descartes aparecen tres niveles de duda: los sentidos, los sueños y el genio maligno
- Los sentidos nos engañan en muchas ocasiones y nos inducen al error: comienza dudando de la experiencia externa.
- Los sueños: en segundo lugar, duda de la experiencia interna de la memoria (sueños).
- El genio maligno: por último, duda de la evidencia de las matemáticas y de la experiencia de la evidencia misma.
Antes de Descartes ya se había utilizado el tema de la duda y se había tratado de encontrar, alguna evidencia incuestionable para fundamentar la filosofía. Por ejemplo, Platón en su diálogo Teeteto, propone el argumento del sueño: existe la posibilidad de que no exista realidad alguna y todo sea una fantasmagoría. En general, el tema del sueño es un tema del Barroco, que aparee en la literatura de la época: Calderón, Schakespeare…
La salida a la duda universal, había sido ya tratada por San Agustín, en Contra los académicos (los escépticos): propone que aunque nos engañen los sentidos no podemos dudar de que existimos, “si dudo, existo”."
Comentario:
Descartes se fundamenta en la Duda Existencial para buscar una primera verdad incuestionable en la que
basar su filosofía. Existen tres niveles de duda:
- Los sueños: Duda de la experiencia interna de la memoria.
- Los sentidos: Nos pueden inducir al error.
- El genio maligno:Duda de la evidencia matemática.